«Estamos entre los primeros lugares en los Países del Mundo, donde los Derechos de las Mujeres se reconocen, se valoran, se respetan, y estamos insertas en todos los Espacios de la Vida, Institucional, Cultural, Económica y Social de nuestra Nicaragua […]» (Cra. Rosario Murillo, 7 de marzo 2023)
El Consejo Nacional de Universidades (CNU), conmemora con profundo compromiso la lucha de todas las mujeres que a lo largo de la historia del mundo han aportado hasta con su vida a la reivindicación de sus derechos. La Organización de las Naciones Unidas (ONU), con la Declaración Universal de Derechos Humanos, aprobada en 1948, y una serie de precedentes desde el siglo XIX relacionados con la violación de derechos de miles de mujeres, conmemora este día desde 1975.
Transformación e igualdad que se construye en luchas colectivas
Nicaragua, un país con trayectoria admirable, que, desde la lucha del pueblo en acompañamiento con diferentes políticas públicas impulsadas por la voluntad política y revolucionaria del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional (GRUN). Ha alcanzado la primera posición en América Latina y la séptima a nivel mundial en igualdad y equidad de género, asimismo, el cuarto lugar de mujeres en cargos ministeriales y el tercero con más mujeres en la Asamblea Nacional.
Esto se convierte a nivel internacional en un indicador clave de la realidad nicaragüense, donde mujeres de distintas zonas del país (urbano o rural) día a día están emprendiendo y generando oportunidad de empleo, mujeres que cada año se integran a las universidades.
El liderazgo femenino que existe en nuestra sociedad no es reciente, desde el proceso de creación de sindicatos en Nicaragua y precisamente con el proceso revolucionario del Frente Sandinista, mujeres como: Lucrecia Lindo, Rosario Luna Quintanilla, Francisca Delgado Nayre, Carolina Osejo Sacasa, Marta Conrado, Arlen Siu, Bertha Calderón Roque, entre muchas otras, entregaron su vida a la causa revolucionaria con la ilusión de ver a su patria en prosperidad, libertad y conciencia social.
La Comandante Doris Tijerino atinó cuando expresó: “No se puede hacer la revolución, sin la participación de la mujer”, frase que inmortalizó las acciones de un periodo revolucionario. Asimismo, reafirma la Dra. Ramona Rodríguez Pérez (2022):
«Las mujeres participamos activamente en el desarrollo político, económico, social y cultural de nuestra nación. En Nicaragua nos enorgullecemos porque ocupamos espacios importantes en el campo de la educación; la reducción de la brecha es evidente, lo que confirma el empoderamiento de las mujeres en todas las áreas de decisión pública, porque es un tema prioritario para el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional (GRUN)».
Es indudable que en Nicaragua nos encontramos en un proceso de desarrollo histórico, sostenible que se acompaña de una revolución; donde la mujer ha sido, sigue y seguirá siendo pilar fundamental de grandes cambios.
A ello, se suman momentos relevantes, donde los cargos ministeriales y directivos lo representan mujeres de alta competencia profesional, pero sobre todo humanística. Ejemplo de ello, la representación en el Ministerio de la Mujer (MINIM), Ministerio de Economía Familiar Comunitaria, Cooperativa y Asociativa (MEFCCA); Ministerio de la Familia (MIFAM), Ministerio de la Juventud (MINJUVE), Ministerio de Educación (MINED), Instituto Nacional Tecnológico (INATEC), Consejo Nacional de Universidades (CNU).
Mujeres protagonistas y que aportan al modelo de desarrollo humano de nuestra Nicaragua; honrando el legado de heroínas que participaron llenas de convicción, valor y compromiso para transformar la patria que un día soñaron y de la cual gozamos actualmente. Como mencionó la Cra. Nora Astorga Gadea, guerrillera del frente sur del Frente Sandinista de Liberación Nacional:
«El pueblo de Nicaragua es mi fuente constante de inspiración. Cuando me siento cansada o me siento impaciente, entonces me pongo a pensar […] en esa fuerza vital que tiene esta Revolución para ir adelante, para resistir, y termino diciéndome: no tengo derecho a cansarme».
Actualmente, identificamos en nuestras comunidades, barrios, municipios y departamentos que los referentes en liderazgo, organización y gestión social tienen rostro de mujer.
Modelo de equidad y complementariedad
Fuente: Viva Nicaragua Canal 13
El CNU, desde un modelo de equidad y complementariedad, ha asumido el compromiso de garantizar la cobertura de Educación Superior en todo el territorio nacional. Tenemos la convicción de seguir acompañando a todas las mujeres en sus luchas educativas, a seguir propiciando desde nuestras universidades las relaciones de respeto y armonía entre hombres y mujeres, a seguir haciendo posible a través de la educación y empoderamiento a mujeres, el cumplimiento de leyes como: “Ley de Igualdad de Derechos y Oportunidades (Ley 648)”, “Ley Creadora del Fondo para Compra de Tierras con Equidad de Género para Mujeres Rurales (Ley 717)”, “Ley integral contra la violencia hacia las mujeres y de reforma la ley 641 código penal (779)”, “Ley de los Derechos de las Personas con Discapacidad (763)”.
El marco jurídico antes mencionado, tiene el objetivo de asegurar el acceso a la educación en todos los niveles, salud y trabajo digno, disposición de créditos para emprendimientos de mujeres, atención en Centros de Desarrollo Infantil (CDI) que son una alternativa para que las madres nicaragüenses tengan la oportunidad de trabajar y estudiar.
En su conjunto, son estrategias que fortalecen el avance y cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 5, titulado: “Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas”, mismo que está reflejado en el quinto lineamiento del Plan Nacional de Lucha Contra la Pobreza y para el Desarrollo Humano 2022-2026, titulado: “Profundizar la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y niñas”, que hasta el día de hoy y por lo expuesto en párrafos anteriores, podemos decir, lo estamos logrando.
Acciones que contribuyen hacia una cultura de igualdad, equidad y de respeto
Las universidades miembros del CNU, han materializado y facilitado cursos libres y postgrado con temáticas relacionadas con Educación Integral en Sexualidad, que permiten promover la transformación sociocultural de hombres y mujeres respecto a la división del trabajo con relación al género, comunicación familiar asertiva; cambio de perspectiva de la cultura machista a una cultura de igualdad, equidad y de respeto.
Existen programas que apuntan a la erradicación de la violencia en Nicaragua a través de la educación superior, por lo que es pertinente mencionar el esfuerzo que se está haciendo desde la articulación interinstitucional del Estado nicaragüense por construir, divulgar y promover cartillas como: “Mujer, dignidad y derecho”, “Mujer, derechos, leyes y mecanismos de denuncia para la prevención del femicidio” y “Familias unidas para la paz y la vida”.
Programas que tienen como objetivo generar un estado de conciencia, de respeto y equidad en hombres y mujeres de todas las edades. Por esta razón, se considera pertinente seguir compartiendo en las Instituciones de Educación Superior el valioso aporte de estas cartillas para la sociedad nicaragüense.
Restitución del derecho a la educación
En tiempos del somocismo (1937-1979) y del neoliberalismo (1990-2006) tenían al pueblo con la bota sobre el cuello, era una utopía, hablar de educación gratuita y de calidad; sobre todo en la Educación Superior, pues, estaba reservada para la burguesía, para las personas con gran poder adquisitivo, y pese a que se concentró en personas con esas características, estaba estructuralmente configurada para brindarse de manera prioritaria a hombres.
Actualmente, la población estudiantil nicaragüense está comprendida por 181,284 estudiantes de Educación Superior; el 58% son mujeres (es decir, 105,144, estudiantes son mujeres). El 27,7% estudian carreras vinculadas a la Salud, el 25,3% relacionadas en Administración de Empresas y Derecho, 24,7% estudian carreras de Educación, Ciencias Sociales y Humanidades, y el 22,3% estudian carreras de cara a las ingenierías, Ciencias Naturales y Agricultura.
En el año 2023 se capacitaron a 25,145 mujeres; alcanzando la Educación Técnica, lo que cuantificó un 68% mujeres matriculadas en el programa Nacional de Educación Técnica en el Campo. En este año académico, el Programa Revolucionario de Universidad en el Campo (UNICAM), alcanzó una matrícula de 27,110 estudiantes; de los cuales 16,537 son mujeres, lo que corresponden al 61%.
Lo antes mencionado, pone en perspectiva cuáles son los avances que ha tenido la Educación Superior en los últimos 17 años del GRUN; gobierno que ha tenido como prioridad la educación del pueblo, la educación y el empoderamiento de las mujeres en diferentes áreas de la ciencia, asumiendo como eje, la pertinencia educativa con relación al contexto y la cultura.
Dar una mirada a los diferentes lineamientos de desarrollo del país acompañados de una planificación estratégica interinstitucional son el resultado y muestra del protagonismo de la mujer, de sus propios cambios, donde cada vez se van desmitificando con hechos que alguna rama de la ciencia como las Ingenierías, Matemáticas, Física o Estadística pueden ser estudiadas solo por hombres.
En conclusión, la mujer nicaragüense es fuerza que mueve cada parte de los engranajes de nuestro país. Es —y ha sido— esperanza, marca indeleble en la historia de nuestra Nicaragua; que ha tenido el honor de ver nacer y acuerpar a mujeres valientes. Mujeres que jamás abandonaron este proceso revolucionario que propicia el bien de todas y todos, y no de unas/unos cuantos/as, proceso revolucionario que ha otorgado dignidad, apropiación, reconocimiento y autonomía del importante papel de las mujeres en la dinámica económica, política y sociocultural de Nicaragua.
Por esta razón, desde el Consejo Nacional de Universidades, damos nuestro reconocimiento, expresando: ¡Gracias por sus luchas victoriosas!; gracias a las hermanas, tías y abuelas que hacen el rol de madre cuando no se cuenta con una; gracias a nuestras maestras, amigas y vecinas, que cuando se necesita están prestas a extender la mano sin necesidad de un lazo sanguíneo; gracias a las mujeres de nuestros barrios y comunidades, que de forma cristiana, socialista y solidaria contribuyen con su talento y disciplina a las tareas de la Revolución.
Referencias
Forum, W. E. (2022). Global Gender Gap Report. World Economic Forum.
Nacional, A. (2008). Asamblea Nacional de Nicaragua. Obtenido de Asamblea Nacional de Nicaragua: https://www.oas.org/juridico/spanish/mesicic3_nic_const.pdf
Nacional, G. d. (Julio de 2021). Plan Nacional de Lucha Contra la Pobreza y Para el Desarrollo Humano 2022-2026. Nicaragua.
Unidas, O. d. (2015). Objetivos de Desarrollo Sostenible. Obtenido de https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/objetivos-de-desarrollo-sostenible/
Miguélez, M. M. (2003). Dimensiones básicas de un desarrollo humano integral. En M. M. Miguélez, Dimensiones básicas de un desarrollo humano integral. San Francisco.
Murillo, R. (2023). Discurso en conmemoración del día de la mujer. https://diariobarricada.com/2023/03/08/la-participacion-de-la-mujer-nicaraguense-en-la-revolucion/
Rodríguez, R. (2023). Acto de celebración de la UNAN-Managua celebra el Día Internacional de la Mujer. https://redcomunica.csuca.org/index.php/universidad-nacional-autonoma-de-nicaragua-managua-unan-managua/unan-managua-celebra-el-dia-internacional-de-la-mujer-2/
Consejo Nacional de Universidades. (2023). Anuario Estadístico 2022 del Subsistema de Educación.
Consejo Nacional de Universidades. (2024). Informe estadístico del Subsistema de Educación Superior. I Semestre 2023.
Elaborado por:
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