«Estamos para continuar cumpliendo nuestro compromiso de asegurar educación superior de calidad y pertinente para garantizar la continuidad educativa de ustedes, jóvenes, que se han destacado en sus estudios de secundaria, convirtiéndose en excelencia académica de la Secundaria académica a distancia en el Campo», declaró la doctora Ramona Rodríguez Pérez, presidenta del CNU, refiriéndose a los cuarenta becados bachilleres 2022 de la modalidad Secundaria en el Campo.

En el auditorio Fernando Gordillo de la UNAN-Managua, se reunieron los jóvenes bachilleres, acompañados por sus padres y madres de familia, con autoridades del CNU y el MINED para recibir certificados que los acredita como becados de educación superior. Esta actividad reconoció la excelencia académica de los educandos y se desarrolló por cuarto año consecutivo en el marco del trabajo conjunto de estas dos instancias y en saludo al cuadragésimo segundo aniversario de la gesta heroica de la Gran Cruzada Nacional de Alfabetización.

Según lo planteado por la rectora Ramona, la mayoría de los bachilleres seleccionaron carreras del programa emblemático Universidad en el Campo (UNICAM), así como de ciencias de la educación, agropecuarias e ingenierías de la UNAN-León, UNAN-Managua, UNI y UNA. La beca proviene del presupuesto constitucional asignado a las universidades; su equivalente es de cinco mil córdobas y será otorgada por un periodo de diez meses. «Es un monto para que se ayuden con su alojamiento, con su transporte, con su alimentación, pero sobre todo para estimularlos (…) La mantención de la beca dependerá de su rendimiento académico», precisó.

En virtud de lo anterior, la académica instó a los jóvenes a gozar de su derecho a la educación gratuita y de calidad que tienen a disposición, asumir con actitud dinámica y proactiva los desafíos que les corresponderá enfrentar en sus procesos formativos. Así lo explicitó:
«Les invito a que se dispongan a triunfar, venciendo las adversidades y los retos que surgirán a partir del desarrollo de los diferentes procesos formativos, conjugando los conocimientos que les compartirán sus docentes con los saberes que cada uno lleva consigo (…) Asuman la educación desde la vida y para la vida, pensando siempre que su familia, la comunidad y el pueblo en general tienen la esperanza en el aporte de ustedes, en el alcance del desarrollo humano sostenible».
En este sentido, la maestra Rodríguez declaró que el compromiso como universidades consiste en asegurarles el ingreso y, en conjunto, garantizar la permanencia en las aulas universitarias, con un acompañamiento oportuno en los procesos formativos y la facilitación de aprendizajes contextualizados a favor de la realización de investigaciones que se vinculen con el entorno y aporten soluciones a los desafíos que enfrentan los distintos sectores económicos, sociales y ambientales. «De esta manera, se graduarán como profesionales con competencias científico-técnicas y con valores y principios humanísticos, revolucionarios, porque son ustedes garantes de que vivamos en revolución por siempre para vivir con dignidad», indicó.
«Estudiantes, deben entregarse a sus actividades académicas con entusiasmo, pasión, deseos de aprender y de evolucionar en su formación académica y como personas. Debemos interiorizar que estamos viviendo la segunda etapa de la revolución nicaragüense, caracterizada por la restitución de todos nuestros derechos, y particularmente la educación, como es el caso que nos ocupa», culminó la presidenta del CNU.
En esta línea de reconocimiento al desempeño óptimo de los estudiantes y de la continuidad educativa, el doctor Salvador Vanegas Guido, ministro asesor de la Presidencia de la República para asuntos educativos, se dirigió a los bachilleres presentes, exteriorizándoles que ellos no están preocupados por la supervivencia como solía ocurrir con gobiernos neoliberales, sino que «están dando una batalla por su dignidad y la de su familia en pocos años, en tanto vayan coronando su carrera universitaria».
«La revolución es el cambio de la vida de cada uno de ustedes. Estamos interrumpiendo la cadena de reproducción de la pobreza (…) Ustedes van a ser personas con gran inteligencia, desarrollo personal y grandes profesionales, y que van a generar ingresos para vivir dignamente y para transformar un sentido de justicia social con una visión de prosperidad y bien común con esas comunidades del campo (…) Se trata de una educación dirigida al desarrollo humano pleno», manifestó el doctor Vanegas.
Estudiantes comprometidos por el alcance de más victorias educativas
En representación de los cuarenta becados, el Br. Erling Maurinet Alvarenga Sánchez, estudiante de primer ingreso de Ciencias de la Educación con mención en Inglés, intervino sobre el compromiso que deben asumir como universitarios y futuros profesionales del país.
«Tenemos el desafío de continuar con nuestros estudios con compromiso, responsabilidad, disciplina y estrategia ante las diferentes tareas. Estamos seguros de que este proceso en las diferentes carreras es un paso más para la reducción de la pobreza. Gracias a que tenemos un modelo de gobierno con alta sensibilidad humana, podemos hacer realidad lo que en gobierno neoliberales sería inalcanzable», expresó.
Alvarenga invitó a los demás bachilleres a jurar ante la patria, familia y ellos mismos la culminación de las carreras seleccionadas para trabajar por las comunidades y, desde luego, por el desarrollo de Nicaragua.