Expertos en Educación Superior de Centroamérica y Cuba, realizan en Nicaragua el seminario “Armonización y Articulación Curricular”, organizado por el Consejo Nacional de Universidades (CNU) y la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN Managua).
“El objetivo de esta actividad es reflexionar sobre los procesos de articulación y armonización educativa. Nicaragua ha venido desarrollando lo que es la articulación de los subsistemas, y este seminario estimula a que las universidades desde el CNU y Consejo Nacional de Rectores, donde estamos todas las universidades legalmente constituidas del país, hagamos un esfuerzo para articularnos, ya que todas estamos comprometidas con la calidad de la educación superior”, expresó la master Ramona Rodríguez, presidenta del CNU y rectora de la UNAN Managua.
El doctor Francisco Alarcón, secretario general adjunto del CSUCA y Doctor Honoris Causa en Educación en la UNAN Managua, abordó el tema del Marco de Cualificaciones para la Educación Superior Centroamericana (MECESCA) para que sea tomado en cuenta para que haya una armonización regional. “Este marco se construyó colectivamente por todas las universidades de la región y los ministerios de educación que define los resultados de aprendizajes esperado de los estudiantes para cada uno de los niveles del subsistema de educación superior”.
Otro tema que se abordó en este encuentro fue el crédito académico como unidad de medida del trabajo integral que realiza el estudiante. “Tenemos una definición de crédito académico centroamericana, y también hay una definición de crédito latinoamericano de referencia, son un poco diferentes en su enfoque pero pueden ser complementarias. La definición de créditos centroamericanos es para 45 hora de trabajo del estudiantes, con un período de 15 semanas, es decir el estudiantes dedica tres horas de trabajo por semanas, de manera independiente, y en contacto con el profesor. El latinoamericano es de 30 horas de trabajo, es un enfoque distinto, y se pueden complementar, todos los estudiantes, no importa el nivel, el crédito académico es una unidad que mide tiempo dedicado a la intensidad del trabajo a lo que los estudiantes realizan para lograr aprobar un curso”, explicó el doctor Alarcón.
Universidades centroamericanas en una sola dirección
Especifica el doctor Alarcón que el Marco de Cualificaciones, es por ejemplo una maestría, un doctorado, un técnico superior, o sea son las titulaciones que se ofrecen en un sistema educativo, están definidas por los resultados de aprendizajes que se espera, “usted no le puede exigir lo mismo a alguien que se está graduando en técnico superior universitario que alguien que se está graduando de un doctorado, hay una progresión de resultados de aprendizajes que se espera que el muchacho adquiera al finalizar cada nivel de educación superior, el marco define esos resultados para cada uno de los niveles, y eso debe servir como sombría general del marco de referencia para los procesos que aquí se quieren desarrollar de armonización académica, eso lo definimos de manera conjunta las universidades de todos los países de la región, ya todos estamos de acuerdo, Panamá, Costa Rica, Guatemala, Nicaragua que vamos a usar esto como unidad de medida, como marco de referencia para poder armonizar lo que hacemos”
La doctora Norma Barrios, vicerrectora Primera de la Universidad de la Haba Cuba, considera que Nicaragua está un momento muy crucial y el hecho de que exista el interés y el propósito de la Universidad de hacerse a tono con su tiempo en este contexto es importante, “y está acudiendo a los especialistas que tienen las mejores experiencias para que su trabajo sea mucho mejor, nosotros hemos venido para apoyar fundamentalmente todo lo que tiene que ver con la transformación curricular, pero de paso, hay que ver como la Universidad puede cumplir en esa transformación curricular con los estándares de calidad lo que nos está llamando justamente hoy el CNU de cara a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que son las metas mundiales para todos los países en materia de educación y muy particularmente de educación superior”.
Puntualiza la doctora Barrios que, la Universidad nicaragüense tiene que emprender un proceso muy fuerte para poder movilizar a los principales actores que intervienen en cualquier modificación, transformación, cambio para la mejora continua, “aquí juegan un papel muy importante, no solo el trabajo de asesoría que nosotros podamos hacer, sino también la participación directa de los distintos actores de la Universidad, profesores que son el centro de la formación de calidad en una Universidad, y sobre todo para poder ubicar el contexto donde se desarrollan esta formación de profesionales para que la academia genere programas que transformen la realidad del país, que atiendan las necesidades emergentes del país, para formar mejores profesionales que puedan estar al servicio de lo que la sociedad necesita. La tarea es grande, pero es necesario e imprescindible, hoy Nicaragua está en las condiciones de poder lograrlo”.